Concejo Municipal de La Higuera rechaza transacciones extrajudiciales y evidencia nueva derrota política de Uberlinda Aquea

Un nuevo revés político sufrió la alcaldesa Uberlinda Aquea este martes en sesión de Concejo Municipal, donde la mayoría de los concejales rechazaron dos acuerdos de transacción extrajudicial propuestos por la administración para resolver conflictos laborales con funcionarios a honorarios. La votación, que terminó con cuatro votos en contra y solo tres a favor, dejó nuevamente al descubierto la fragilidad política de la gestión municipal.

Las transacciones, por montos de 3 y 6 millones de pesos respectivamente, buscaban evitar juicios laborales por reconocimiento de vínculo contractual y demandas de cotizaciones previsionales. Según el administrador municipal, las acciones eran legítimas y beneficiosas para las arcas públicas, dado que evitaban pagos mayores por concepto de cotizaciones y prolongados procesos judiciales. Sin embargo, los argumentos no convencieron al cuerpo colegiado.

Críticas a la improvisación y falta de información

Concejales como Roquer González e Ivana Godoy cuestionaron duramente la forma en que se presentó el tema. Reclamaron por la tardía entrega de antecedentes y la ausencia de contratos, e incluso señalaron que debieron recurrir directamente a la Contraloría para asesorarse, lo que calificaron como una falta de responsabilidad del equipo jurídico.

“Me parece inaceptable que como concejales tengamos que hacer la pega a los asesores jurídicos”, dijo González, quien fue enfático en señalar que la forma de pago propuesta no sería legal, según lo que le informó directamente personal de Contraloría.

Godoy, por su parte, lamentó que la administración actuara con tanta agilidad para cerrar acuerdos extrajudiciales, mientras que muchas causas judiciales laborales siguen sin solución.

Desgaste interno y falta de conducción

El episodio evidenció nuevamente la falta de manejo político de la alcaldesa Uberlinda Aquea, quien votó a favor de ambas propuestas, pero fue nuevamente superada por la falta de apoyo en su propio Concejo. Su propuesta recibió respaldo solo de los concejales Ivonne Valenzuela y Urbano Morales, además de ella misma, mientras que los restantes ediles votaron en contra.

Este rechazo sigue mostrando una descoordinación interna, así como una fractura evidente en la conducción política de la administración, que no logra articular mayorías ni convencer con sus argumentos técnicos. A esto se suma la permanente improvisación en temas como decisiones jurídicas relevantes llegan sin el respaldo adecuado, y se apuesta a que la buena voluntad supla la falta de estrategia y preparación.