Pescadores y mariscadores de Punta de Choros reafirman su rechazo a Dominga

En un pronunciamiento público, la Asociación Gremial de Mariscadores y Pescadores de Punta de Choros volvió a alzar la voz contra el proyecto minero-portuario Dominga, a solo horas de conocerse el fallo del Tribunal Constitucional que despejó los obstáculos institucionales para su avance. En una declaración difundida a través de sus redes sociales, los pescadores artesanales rechazaron tajantemente el megaproyecto impulsado por Andes Iron, al que acusan de amenazar la biodiversidad, el turismo sustentable y la forma de vida costera de la comuna de La Higuera.

“Decimos NO a Dominga porque este no es un proyecto cualquiera. Es una amenaza directa a uno de los ecosistemas marinos más valiosos y frágiles del planeta“, señalan, en alusión a la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt y las aguas que rodean Punta de Choros, Isla Damas, Isla Choros e Isla Chañaral. El gremio advierte que el proyecto pone en riesgo especies en peligro como el delfín nariz de botella, la ballena azul, el chungungo y el emblemático pingüino de Humboldt.

La organización, compuesta por trabajadores del mar que por generaciones han vivido de la pesca artesanal, defiende un modelo de desarrollo alternativo, basado en el respeto a la naturaleza, la economía local y el turismo consciente. “Un puerto industrial de esta magnitud pone en riesgo todo ese esfuerzo. ¿Quién va a querer visitar playas contaminadas? ¿Quién va a confiar en la pureza de nuestros productos del mar cuando buques cargueros y faenas mineras alteren las aguas?“, se preguntan.

Además, denuncian que la actividad minera divide a las comunidades, crea falsas expectativas laborales de corto plazo y amenaza el frágil equilibrio hídrico de la zona. “La minería da trabajo por un par de años; el mar, si lo cuidamos, da vida para siempre”, aseguran.

La declaración también acusa que el proyecto pretende extraer agua dulce del acuífero costero, lo que afectaría gravemente a cultivos, crianceros y familias rurales en un territorio históricamente golpeado por la escasez hídrica.

El gremio finaliza su mensaje con una apelación generacional: “No queremos que nuestros hijos crezcan viendo grúas, barcos carboneros y polvo de mineral en el aire. Queremos que crezcan viendo ballenas en el horizonte”.

“NO a Dominga. SÍ a una Higuera sana y viva para las futuras generaciones”, concluye la declaración.